A dónde vas tan rápido? Recuperando el ritmo creador

A dónde vas tan rápido?, te pregunta la Tierra.

Nuestra creatividad y poder creador nunca encontrarán total expresión sino nos movemos al ritmo y junto a los ciclos de la Tierra. La Naturaleza es LA Maestra creadora. Nunca llega tarde, ni se queda en deficiencia. El Universo acompaña llenando cada nuevo espacio con más combinación elemental.

La magia para poder coserse en nuestros tejidos necesita que nosotros vivamos en sincronía con el Cielo y la Tierra. Que nuestros pies no vayan más rápido que nuestra lengua, ni que se queden palabras atascadas en el paladar o rebalsando en la mente sin poder decantar.

Nuestra realidad depende de nuestros ciclos biológicos y cósmicos. La eficacia y el poder de la Magia responde más a nuestra cadencia equilibrada que a las pócimas y conjuros.

 Nuestro poder mágico depende de nuestra respiración abdominal y alinearnos a nuestro BIOritmo. CONFIAR.

A dónde vas tan rápido es un viaje al universo de la FLOTABILIDAD, de aprender la riqueza del fluir de la Ballena, de la Medusa y de los Perezosos. Del movimiento acuático y terrenal. Del movimiento femenino, de nuestra sabiduría innata que sabe esperar, cuidar, gozar y actuar, sin prisas ni forzar.

A dónde vas tan rápido…que tu singularidad no tiene la calma ni la paz de poder expresarse en toda su belleza y potencial.

A dónde vas tan rápido, que en el acelere te dejas olvidado en el camino y terminas viviendo una vida que no es la tuya

A dónde vas tan rápido, que llegas antes de que la oportunidad se haya manifestado y te creas un vacío existencial

A dónde vas tan rápido, que no le das aire ni tiempo a tu alma para que te cuente cómo manifestar tu felicidad.

A dónde vas tan rápido es una invitación a llevar al cuerpo a un nuevo movimiento, a recordarse en su profundidad fértil, a nutrir al sistema nervioso con un disfrute que aflojará las estructuras limitadas y las disolverá.

En esa lentitud, algunos podrán crear el espacio para que sus ideas creativas afloren y sean apreciadas y gozadas.

En esa lentitud, otros sentirán la seguridad y calma para adentrarse en su profundidad, desconectar de su acelere mental y descubrir sus tesoros oculta.

En esa lentitud, muchos recuperarán si ciclo natural, su aire de vida, su paz.

En esa lentitud, Eros finalmente resurgirá.

La Naturaleza no nos quiere estresados, nos quiere extáticos, porque sabe que es el disfrute singular lo que nos mantiene creadores, en movimiento y llenos de vitalidad.